viernes, 20 de noviembre de 2009

Crisis del Régimen Oligárquico


Después de la crisis de 1890, que se prolongó hasta 1895, la reorganización de la política financiera y un nuevo auge de las exportaciones tuvieron como resultado el restablecimiento del bienestar económico entre una gran parte de la población. En el plano político, luego de la revolución, nada parecía haber cambiado en el funcionamiento del sistema de gobierno.

Hasta 1910 se sucedieron los gobiernos ele presidentes que no tenían el apoyo político real de sectores amplios de la sociedad. Por el contrario, su mantenimiento o no en el gobierno dependía de si contaban con el apoyo, o no, de los notables del PAN o de otros grupos de la clase gobernante. Las decisiones y acciones de Roca o de Mitre fueron fundamentales para definir las sucesiones presidenciales o los gabinetes que debían acompañar al primer mandatario. Este personalismo se vio favorecido porque el partido político del gobierno, el PAN, no era una organización en la que se discutían proyectos y políticas ni se reclutaba a los hombres más capacitados para ponerlos en práctica desde el gobierno. El PAN y todos los partidos políticos que se habían organizado hasta entonces eran, en primer lugar agrupaciones personalistas que apoyaban al hombre fuerte de turno y que compartían sus principios ideológicos